Rampage

Rampage es un interceptor al que poco le importa la opinión del enemigo. Si quiere a su objetivo fuera de su camino, este se va a tomar viento fresco. Si quiere que alguien suelte la bomba, pues la suelta y punto. Si quiere arrastrar a todo el equipo enemigo y tirarlo a la lava, pues… «sayonara, equipo enemigo».

El carácter pasivo-agresivo de Rampage no debería ni mucho menos tomarse a broma. Si usas bien sus armas, reducir el daño recibido puede ser el factor determinante en un combate, aunque debes recordar alinear la cuchilla de su buldócer en dirección a la zona en la que se quiere infligir daño, incluso si ello implica conducir marcha atrás. Cuando domines esta arma, podrás sobrevivir durante un gran periodo de tiempo y, así, podrás llevar a cabo muchas más intercepciones.

Minimum Wage es el arma principal. Además de causar daño, asesta un gran empujón a los enemigos. ¿Por qué elegir entre empujar y aplastar a tus contrincantes, cuando puedes hacer ambas cosas con la misma arma? Sobre todo, cuando además puedes empujar al enemigo a la zona de caída o la lava.

El arma Harassement, en cambio, es furia en estado puro, pues otorga daño en línea recta y en un rango amplio, además de ser incluso capaz de atravesar las paredes en su ruta caótica y llena de furia.

El arma Trafic Jam es un ataque frontal con la cuchilla que inflige daño y atrae a los rivales hacia ti. Si colisionan con un muro por el camino, los enemigos recibirán daño extra. Nada transmite mejor la rabia contenida que lanzar a tus enemigos contra los muros o derretirlos con una muerte cuádruple en la lava.

El arma especial de este piloto, Saturday Shift, consiste en que, cuando Rampage alcanza la cúspide de su furia, ataca levantando la grúa y dejándola caer de nuevo para arrasar así con todo lo que hay a su alrededor y provocar daño crítico a los contrincantes situados a unos centímetros de distancia. Con este arma, Rampage puede dar rienda suelta a toda su ira y destruir a sus enemigos.

Rampage no ha sido siempre la fuerza colérica y altamente destructiva que es en la actualidad. Antaño, Rampage era un brillante maquinista que ansiaba con conseguir un mundo mejor para todos trayendo tecnología y prosperidad a los Yermos. Su objetivo era convertir a Metal City en un faro iluminador que representase lo mejor de la humanidad. No obstante, el estado actual en el que se encuentra Metal City demuestra que Rampage no tuvo mucho éxito en su propósito.

Durante su trabajo en una empresa llamada Maximatics, Rampage era considerado un genio y, por ello, dicha empresa lo seleccionó para participar en un proyecto llamado Project Rebirth. Este proyecto consistía en una visión del futuro en la que el mundo volvería a ser un lugar seguro para la humanidad, puesto que se recuperaría el mundo del ayer para convertirlo en el mundo del mañana. La verdadera naturaleza del Project Rebirth era, sin embargo, construir una gran fortaleza para Solomon Lorde, el dueño y señor de Maximatics.

Rampage se convirtió en la herramienta perfecta para Maximatics, puesto que no dudó en barrer una zona situada a las afueras de Metal City y en eliminar a los que allí vivían para construir una fortaleza donde Maximatics pudiese operar. Rampage estaba convencido de que este proyecto era beneficioso para ellos, incluso a costa de que su humanidad y su libertad le fuesen arrebatadas. No obstante, en el momento en que descubrió que había sido traicionado, Rampage entró en cólera y comenzó a usar su buldócer para destrozar los cimientos de las instalaciones mientras la ira se apoderaba cada vez más de él.

Actualmente, Rampage se dedica a competir en la arena con su colosal buldócer, aplastando a sus contrincantes contra la cuchilla de su potente vehículo y apilándolos como si de montañas de escombros se tratase. Así, el brillante joven que ansiaba hacer del mundo un lugar mejor, terminó por dejar que las ansias de reducir todo a escombros a su paso se apoderasen de él, en un vano intento de aplacar su ira insaciable.